[:pb]Há cerca de 50 anos, estabeleceu-se a crença de que a fibrose e a cirrose eram irreversíveis[:es]¿La fibrosis y la cirrosis son condiciones irreversibles?[:]

2813

[:pb]Há cerca de 50 anos, estabeleceu-se a crença de que a fibrose e a cirrose eram irreversíveis e essa concepção permaneceu por longo tempo. Ocorre que o ponto em que a cirrose ou a fibrose extensa passa a ser irreversível ainda não estava na época perfeitamente definido.

Os relatos de regressão da fibrose e da cirrose têm em comum a eliminação da causa da doença que originou o problema ou a aplicação de um tratamento eficaz. Os exemplos são muitos e incluem a abstinência do álcool, a inversão cirúrgica na obstrução biliar, a terapia com imunossupressores para a hepatite auto-imune, o tratamento em longo prazo da hepatite B, o tratamento da hepatite C, e o tratamento de cirroses biliares primárias.

Normalmente, a regressão histológica da fibrose é acompanhada por uma melhora clínica e bioquímica, de acordo com alguns estudos, inclusive com diminuição da fibrogenesis hepática (que não requer biópsia). Em ensaios controlados de tratamento com Interferon e Ribavirina para o tratamento da hepatite C e no tratamento da hepatite B com diversos medicamentos, também observou-se a diminuição da fibrose ou da cirrose.

Nos últimos anos, foi melhor entendida a forma da regeneração celular e molecular da fibrose hepática. Este conhecimento mantém uma explicação racional sobre a reversibilidade potencial do processo. Está claro que a acumulação extracelular, a cicatriz, nas doenças do fígado com fibrose, não é estática ou um evento unidirecional, senão que se trata de um processo dinâmico e regular, dócil à intervenção. A ativação de células hepáticas é o evento central na fibrose hepática. Em todas as formas de lesão avançada, estas células sofrem uma conversão de células imóveis, para células contrácteis, proliferativas e fibrogênicas.

Estas crescentes evidências clínicas e científicas sugerem que a fibrose extensa ou a cirrose nos pacientes com a função hepática conservada não devem ser consideradas como não-tratáveis. As terapias atuais (e futuras) têm o potencial de impedir a progressão da doença e reprimir os mecanismos que levam à degradação das células, com a conseqüente regressão da fibrose e da cirrose.

No entanto, existem ainda várias incógnitas sobre o assunto. A fibrose não progride com a mesma velocidade em todos os pacientes, e as respostas ao tratamento são muito diferenciadas. Portanto, são necessários novos estudos para identificar os fatores específicos da doença que se associam para uma progressão mais lenta da fibrose e uma resposta favorável ao tratamento.

É muito importante que, durante o tratamento desenvolvido para inverter as fibroses mais críticas, sejam analisadas todas as estratégias possíveis. A terapia com antivirais pode melhorar o estado do fígado nos pacientes com hepatite, inclusive quando o tratamento não responde e não negativa o vírus. Somente esta descoberta já pode, em si, justificar os tratamentos, segundo determinadas circunstâncias, nos pacientes sem resposta virológica ao tratamento.

Carlos Varaldo
www.hepato.com
hepato@hepato.com


IMPORTANTE: Os artigos se encontram em ordem cronológica. O avanço do conhecimento nas pesquisas pode tornar obsoleta qualquer colocação em poucos meses. Encontrando colocações diversas que possam ser consideradas controversas sempre considerar a informação mais atual, com data de publicação mais recente.


Carlos Varaldo e o Grupo Otimismo declaram não possuir conflitos de interesse com eventuais patrocinadores das diversas atividades.


Aviso legal: As informações deste texto são meramente informativas e não podem ser consideradas nem utilizadas como indicação medica.
É permitida a utilização das informações contidas nesta mensagem desde que citada a fonte: WWW.HEPATO.COM


O Grupo Otimismo é afiliado da AIGA – ALIANÇA INDEPENDENTE DOS GRUPOS DE APOIO


[:es]Hace cerca de 50 años, se estableció la creencia de que la fibrosis y la cirrosis eran irreversibles y esa concepción permaneció por largo tiempo. Ocurre que el punto en el que la cirrosis o la fibrosis extensa pasa a ser irreversible aún no estaba en la época perfectamente definido.

Los relatos de regresión de la fibrosis y de la cirrosis tienen en común la eliminación de la causa de la enfermedad que originó el problema o la aplicación de un tratamiento eficaz. Los ejemplos son muchos e incluyen la abstinencia del alcohol, la inversión quirúrgica en la obstrucción biliar, la terapia con inmunosupresores para la hepatitis auto-inmune, el tratamiento en largo plazo de la hepatitis B, el tratamiento de la hepatitis C, y el tratamiento de cirrosis biliares primarias.

Normalmente, la regresión histológica de la fibrosis es acompañada por una mejora clínica y bioquímica, de acuerdo con algunos estudios, incluso con disminución de la fibrogenesis hepática (que no requiere biopsia). En ensayos controlados de tratamiento con Interferón y Ribavirina para el tratamiento de la hepatitis C y en el tratamiento de la hepatitis B con diversos medicamentos, también se observó la disminución de la fibrosis o del cirrosis.

En los últimos años, fue mejor comprendida la forma de la regeneración celular y molecular de la fibrosis hepática. Este conocimiento mantiene una explicación racional sobre la reversibilidad potencial del proceso. Está claro que la acumulación extracelular, la cicatriz, en las enfermedades del hígado con fibrosis, no es estática o un evento unidireccional, sino que se trata de un proceso dinámico y regular, dócil a la intervención. La activación de células hepáticas es el evento central en la fibrosis hepática. En todas las formas de lesión avanzada, estas células sufren una conversión de células inmóviles, para células contractéis, proliferativas y fibrogénicas.

Estas crecientes evidencias clínicas y científicas sugieren que la fibrosis extensa o la cirrosis en los pacientes con la función hepática conservada no deben ser consideradas como no-tratables. Las terapias actuales (y futuras) tienen el potencial de impedir la progresión de la enfermedad y reprimir los mecanismos que llevan a la degradación de las células, con la consecuente regresión de la fibrosis y de la cirrosis.

Sin embargo, existen aún varias incógnitas sobre el asunto. La fibrosis no progresa con la misma velocidad en todos los pacientes, y las respuestas al tratamiento son muy diferenciadas. Por tanto, son necesarios nuevos estudios para identificar los factores específicos de la enfermedad que se asocian para una progresión más lenta de la fibrosis y una respuesta favorable al tratamiento.

Es muy importante que, durante el tratamiento desarrollado para invertir las fibrosis más críticas, sean analizadas todas las estrategias posibles. La terapia con antivirales puede mejorar el estado del hígado en los pacientes con hepatitis, incluso cuando el tratamiento no responde y no negativa el virus. Solamente esta descubierta ya puede, en sí, justificar los tratamientos, según determinadas circunstancias, en los pacientes sin respuesta virológica al tratamiento.

Carlos Varaldo
www.hepato.com
hepato@hepato.com 


IMPORTANTE: Los artículos se encuentran en orden cronológico. El avanzo del conocimiento en las pesquisas puede tornar obsoleta cualquier colocación en pocos meses. Encontrando colocaciones diversas que puedan ser consideradas controversias siempre debe se considerar la información más actual, con fecha de publicación más reciente.


Carlos Varaldo y el Grupo Optimismo declaran que no tienen relaciones económicas relevantes con eventuales patrocinadores de las diversas actividades.


Aviso legal: Las informaciones de este texto son meramente informativas y no pueden ser consideradas ni utilizadas como indicación médica.


Es permitida la utilización de las informaciones contenidas en este mensaje si se cita la fuente: WWW.HEPATO.COM


El Grupo Optimismo es afiliado a AIGA – ALIANZA INDEPENDIENTE DE GRUPOS DE APOYO[:]